Francia salíó fuerte con cuatro ocasiones de gol en apenas diez minutos. M´Bappé, Griezmann y Dembelé salieron con ganas y esto parecía que iba a ser un paseo militar para Francia, pero la realidad es que no fue así. Pasado los diez minutos, Francia bajó el ritmo y los tres de arriba ya no recibían con tanta facilidad debido a que el entramado defensivo australiano empezaba a dar resultado. Una de las causas del cortocircuito que tenía Francia en su juego era la poca aportación ofensiva de su centro del campo, y es que Pogba no era capaz de generar juego ofensivo.
El partido solo tenía un dominador y la sensación es que el encuentro o quedaba en empate por la inoperancia en ataque de Francia o tarde o temprano caería la victoria gala porque Australia no hacia nada en ataque, y lo poco que generaban lo cortaba un especialista en el corte como Kanté que ha hecho un gran partido.
El dominio era de Francia pero sin embargo la ocasión más clara del primer tiempo la tuvieron los australianos cuando una falta lateral sin apenas peligro, el balón cambia de trayectoria gracias a un rebote y se tiene que lucir Lloris para evitar la sorpresa en este encuentro. Al descanso se llegaba 0-0 en el marcador.
El segundo tiempo fue más entretenido que el primero para el espectador. Francia se pondría por delante en el minuto 58 gracias a un penalti que le hacen a Griezmann que en primera instancia no se pitó pero que unos instantes después, el colegiado decide ver las imágenes y decretar posteriormente penalti. Desde mi punto de vista aprecio contacto pero no lo veo suficiente para señalar penalti. En cualquier caso se señaló transformándolo en gol el "principito" Griezmann.
Cuando lo lógico hubiera sido que este gol abriera la lata y que Francia se le abriera el camino a la victoria, cuatro minutos después el colegiado señala penalti a favor de Australia en una jugada con un centro lateral sin excesivo peligro que incomprensiblemente Umtiti mete la mano para sacar el balón. El máximo goleador de Australia en la fase de clasificación, Jedinak fue el encargado de establecer la igualada.
Quedaba 30 minutos de partido y Deschamps no lo tenía nada claro porque Francia en juego estaba bloqueado. En el minuto 70 el seleccionador francés no le tiembla el pulso y saca del partido a Griezmann y Dembelé que no estaban entrando en juego para meter a Giroud y Fekir y jugar más por dentro haciendo un juego más directo cambiando el 4-3-3 por el 4-4-2 o 4-4-1-1, ya como lo queráis interpretar.
El cambio generó un cierto rum rum pero la realidad es que Francia mejoró teniendo Pogba un compañero más creativo en el centro del campo como Fekir.
El gol de la victoria llegaría en el minuto 80, en una jugada buena por dentro que llega desde atrás Pogba y con fortuna por el desvío de su disparo por un defensor acaba sorprendiendo al portero Aussie Ryan haciendo una parábola imposible superándolo por arriba terminando en el larguero y entrando finalmente en la portería por un pelo.
Al final debut con victoria de Francia que no convenció. El cambio de sistema de Deschamps clave para cambiar algo en un partido que estaba destinado al empate.
Australia jugó bien, plantando cara dentro de sus posibilidades. Se va con derrota pero seguro que con moral para seguir soñando con pasar la fase de grupo.
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